Sistemas de Riegos

En la visita a la estación experimental de pirque, nos percatamos que dependiendo de la fruta, hortaliza o vegetal que se cultiva, va a existir un estilo de riego diferente para cada una. Todo esto se hace pensando únicamente en el bienestar de los vegetales.

Riego por aspersión:
Es el sistema más utilizado en la jardinería o empastados, porque se asemeja a la lluvia, pero con una ventaja: el control de tiempo y la intensidad. Este sistema consta de un suministro de agua bajo presión a través de tuberías.

En pirque este tipo de riego es utilizado en los fardos, porque la cantidad de ellos es demasiado y el sector a regar es enorme, y parte de las características del riego por aspersión, es que esta hecho principalmente para regar sectores muy grandes, así se ahorra agua (se puede regular) y también la mano de obra.

Riego por surco:
Este sistema es fácil de ocupar, el agua se desliza siguiendo la pendiente y no requiere de energía extra para darle movimiento. Para lograr un riego eficiente se deben considerar: el caudal de entrada en la cabecera del surco y el tiempo de riego necesarios para que el agua llegue al final del surco en la cantidad deseada. En pirque, el riego por surco se utiliza principalmente en los cultivo extensivos, como el trigo o el maiz. La frecuencia de regado dependerá del cultivo y del clima y de la epoca del año. La forma de regar es por tendido y el agua utilizada es la que desciende de la cordillera, los deshielos, que llegan a los canales. Esta muchas veces se guarda en tanques como reserva.

Aquí se puede apreciar los surcos en un cultivo de tomates. Estos son regados cada semana. Por los surcos pasa el agua y de esta forma los tomates reciben el agua necesaria, ni más ni menos.

Riego por fertirrigación:
Es el más practico sistema ya que mezclado con el agua va el fertilizante que necesita cada cultivo. Se trata, por tanto, de aprovechar los sistemas de riego como medio para la distribución de estos alimentos nutritivos utilizando el agua como vehículo en el que se disuelven éstos. Básicamente se asocia con riegos localizados de alta frecuencia (riego por goteo, exudación, etc.) Es aplicado en los árboles frutales, como por ejemplo, el manzano o el almendro. El agua utilizada se obtiene de norias, pozos y el tiempo de regado varia, ya que puede ser una vez al día o si es verano, una vez a la semana.

En la foto se aprecia el riego de fertirrigación, utilizando el método de goteo. Los pequeños tubos que pasan por debajo de los árboles, al momento del regado se llenan de agua, los fertilizantes y nutrientes disueltos en ella. Como este método de regadío es el más completo, se considera el más eficiente.

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